Uruguay cesa obligación de tapabocas en centros de salud públicos

Reciente decreto en Uruguay elimina la exigencia de tapabocas en centros de salud, marcando un cambio significativo en la política sanitaria.

Gobierno uruguayo emite decreto que relaja uso de mascarilla en centros de salud y actualiza protocolos de Covid-19.

El Poder Ejecutivo uruguayo ha promulgado un nuevo decreto que redefine las pautas y estrategias frente al Covid-19, incluyendo una actualización en las recomendaciones de testeo, financiamiento y medidas de control. De forma destacada, este nuevo marco normativo elimina la obligatoriedad del uso de mascarillas al ingresar a los establecimientos de salud para los usuarios, marcando un cambio significativo en la respuesta sanitaria del país.

Este cambio regulatorio entró en vigor el miércoles 27 de diciembre, según confirmaron fuentes del Ministerio de Salud Pública a Montevideo Portal. El decreto en cuestión reemplaza al Anexo I del Decreto N° 72/023 de marzo de este año, estableciendo nuevas directrices en la lucha contra el virus.

Según el documento, que lleva la firma del presidente Luis Lacalle Pou y la ministra de Salud Pública Karina Rando, el personal de salud deberá continuar utilizando mascarillas en situaciones de riesgo y siguiendo los protocolos establecidos previamente. No obstante, para la población general, se mantiene la sugerencia de usar mascarillas en espacios cerrados, mal ventilados o con alta concentración de personas, especialmente para aquellos en grupos de riesgo o vulnerables.

El decreto también enfatiza la importancia de la mascarilla para personas con síntomas respiratorios, recomendando su uso durante el período de aislamiento y hasta 48 horas después de su finalización. Este punto subraya la persistencia de la tos y la astenia incluso después de la resolución de otros síntomas, por lo que se aconseja precaución.

Importante destacar, el documento recalca que estas recomendaciones son adaptables y podrían modificarse en función de la evolución de la situación epidemiológica. Este enfoque flexible y basado en la evidencia subraya el compromiso del gobierno uruguayo con una respuesta ágil y efectiva ante la pandemia, adaptándose a las circunstancias cambiantes para proteger la salud y el bienestar de la población.