Una familia uruguaya enfrenta el dolor y la impotencia tras un incidente de abuso infantil por parte del abuelo.
Un dramático incidente en un hotel vacacional en Uruguay desencadena un escándalo de abuso infantil, revelando falencias en el sistema de justicia y provocando una ola de indignación pública.
El 3 de enero, una familia enfrentó una de las situaciones más desgarradoras que pueden imaginarse. Durante una estadía en un hotel vacacional, invitaron al abuelo de los niños y a su pareja a pasar el día con ellos. Esa noche, mientras la pareja del abuelo era llevada a casa, el abuelo quedó al cuidado de sus nietos. En un giro inesperado y traumático, el abuelo intentó administrar Diazepam a su nieta de 12 años en un refresco, acompañado de un intento de manoseo y amenazas.
Los padres, al regresar, notaron un comportamiento extraño en su hija, pero asumieron que se debía al calor y a una indisposición previa. La niña, afectada por el incidente, durmió en la habitación de sus padres mientras el abuelo permanecía en la sala.
La mañana siguiente, mientras los padres realizaban mandados, recibieron una llamada desesperada de su hija, alertándolos de que el abuelo estaba abusando de ella. Afortunadamente, estaban cerca y pudieron llegar en minutos, aunque esos momentos se sintieron eternos para la angustiada familia. Al llegar, encontraron a su hija en estado de shock y al abuelo sentado tranquilamente.
El padre, consumido por la ira, confrontó al abuelo, y estuvo a punto de agredirlo físicamente antes de ser detenido por la policía. A pesar de la gravedad del incidente, el abuelo inicialmente no fue detenido, ya que se esperaba una evaluación médica de la niña.
Posteriormente, el 5 de enero, la familia recibió una notificación del juez Almeida, indicando que al abuelo solo se le impondría una restricción de acercamiento y comunicación por 180 días. Esta decisión, sumada a otra causa abierta por abuso por parte del mismo individuo, generó incredulidad y enfado en la familia.
El padre, abrumado por la frustración y el deseo de justicia, consideró tomar represalias por su cuenta, pero decidió no hacerlo por el bien de su familia y por respeto a la ley, a pesar de su descontento con la respuesta judicial.
Este caso ha resonado profundamente en la sociedad local, debido a la publicacion en todas las redes poniendo de manifiesto las debilidades del sistema de justicia en casos de abuso infantil. La familia afectada, destrozada por el trauma y la inacción legal, ha hecho pública su historia, buscando crear conciencia y evitar que otros sufran una situación similar.