Dani Alves se defiende en juicio: niega abuso y alega consentimiento en Barcelona

El exfutbolista Dani Alves (c) durante un juicio en la Audiencia de Barcelona, a 5 de febrero de 2024, en Barcelona, Catalunya (España). Alves está acusado de agresión sexual a una chica en un baño de la discoteca Sutton de la capital catalana la noche de – EUROPA PRESS/D.Zorrakino. POOL – Europa Press

El exjugador del Barcelona, actualmente en prisión preventiva, sostiene que la interacción con la denunciante fue consensual y rechaza ser violento.

El pasado miércoles, durante la conclusión del juicio, el exdefensor brasileño Dani Alves, enfrentó las acusaciones de abuso sexual negando cualquier acto de violencia en su encuentro con una mujer en un club nocturno de Barcelona en 2022. Con 40 años, Alves ha estado detenido desde enero del año anterior, según informa AFP.

Alves refutó las acusaciones de haber abusado de una mujer en la discoteca barcelonesa en 2022, asegurando que la presunta afectada tenía la libertad de marcharse «en cualquier momento». Durante una declaración de veinte minutos, limitada a las preguntas de su defensa, el exjugador del Barcelona y PSG enfatizó que no es «un hombre violento» y que ambos estaban disfrutando del momento sin que ella expresara objeción alguna.

El deportista, quien se encuentra en prisión preventiva desde hace más de un año por los sucesos de aquella noche del 30 al 31 de diciembre de 2022, compartió que, tras consumir alcohol, conoció a la denunciante en una zona exclusiva de la discoteca Sutton. Describió cómo, después de bailar y sentir una «tensión sexual», sugirió ir al baño donde ocurrieron los hechos que describe como consensuados, contradiciendo las acusaciones de la joven sobre violencia física.

El juicio, tras tres días de testimonios, avanza hacia la deliberación por parte de un panel de tres jueces. La defensa de Alves ha solicitado su absolución, proponiendo como alternativa una condena de un año de prisión —tiempo ya cumplido en preventiva— y una compensación de 50.000 euros.

La Fiscalía, por su parte, ha mantenido su petición de nueve años de prisión para Alves, con la acusación particular elevando la solicitud a doce años y ambos demandando 150.000 euros de indemnización. La defensa argumenta a favor de una pena menor, citando la embriaguez parcial y la reparación del daño como factores atenuantes.

Desde su detención en enero del año pasado, Alves ha ofrecido versiones contradictorias sobre la noche en cuestión, inicialmente negando cualquier encuentro sexual con la denunciante para luego admitirlo, justificando su cambio de relato por el deseo de proteger su matrimonio.

La denunciante relató cómo, tras ser invitada junto a sus amigas a la mesa de Alves en la discoteca, terminó siendo guiada por él a un baño donde ocurrió la agresión. A pesar de su deseo de irse, afirmó que Alves la retuvo, detallando un ataque que incluyó violencia física y psicológica, corroborado por lesiones y evidencias de agresión sexual examinadas en el Hospital Clínic.

Este caso ha capturado la atención pública y mediática, destacando la importancia de la justicia y el respeto a la integridad personal en situaciones de vulnerabilidad.