El líder del Mundial mantiene a raya a los McLaren y los Ferrari de Sainz y Leclerc se retiran
El piloto holandés de Fórmula 1 Max Verstappen (Red Bull) recuperó el sabor de la victoria al imponerse este domingo en el Gran Premio de Canadá, marcado por el ir y venir de la lluvia, donde el español Fernando Alonso (Aston Martin) finalizó sexto y Carlos Sainz (Ferrari) No termino.
Después de nueve carreras, el actual tricampeón del mundo sigue siendo líder indiscutible del Mundial, a pesar de las últimas «sorpresas». El de McLaren parece seguir igual, ya que Lando Norris fue segundo y Oscar Piastri, quinto, con el podio completado por el inglés George Russell (Merecedes), que partió desde la pole.
En cuanto al español, Alonso volvió a sentirse competitivo en un fin de semana muy complicado, pero que dejó atrás tres carreras de sufrimiento. El bicampeón del mundo partía sexto y mantenía su posición, mientras que, tras terminar tercero en Mónaco, Carlos Sainz ponía fin con abandono a un agónico GP de Canadá.
Verstappen no pareció tener suficiente en la primera mitad de la carrera pero, tras un primer coche de seguridad a falta de 30 vueltas, se puso en cabeza. La salida fue agradable, con mucha agua pero se esperaba que durara 15 minutos. El Haas de Nico Hülkenberg y Kevin Magnussen optó por el neumático de lluvia y ganó muchas posiciones respecto al resto de intermediarios.
Russell aprovechó la visibilidad de no tener a nadie delante, mientras que el colapso de Ferrari fue confirmado por Gilles Villeneuve. Saliendo undécimo y duodécimo, Charles Leclerc fue avisado desde el principio de un problema de motor y Sainz no tenía opción de adelantar por falta de agarre estos días.
La carrera consistió en seguir la pista seca y el primero en buscar la victoria fue Norris, que superó a Verstappen y Russell con aparente facilidad. El radar de lluvia avisó de que regresaría, pero la parada la precipitó el coche de seguridad provocado por Logan Sargeant (Williams). Allí, y no en pista, Alonso perdió posición ante Lewis Hamilton (Mercedes), mientras Sainz se quedó en la decimocuarta posición y Ferrari se enredó con Leclerc.
El monegasco, que venía de ganar en casa, arriesgó con los neumáticos de seco y tuvo que volver a entrar poco después porque apareció la lluvia. De mayor a menor, Leclerc acabó abandonando. Verstappen volvió y, tras el agua, la pista empezó a secarse, aunque por partes y con riesgos.
Hamilton fue el primero en optar por el seco y Norris optó por lo contrario que los demás. Ambas estrategias no resistieron a Red Bull, un Verstappen que todavía tenía un calvario por delante con otro coche de seguridad, el provocado por Sainz. El Ferrari del piloto madrileño tampoco acabó en un trompo que puso por delante a Alex Albon (Williams).
Una vez más agrupados, el holandés, con su tercera victoria consecutiva en Montreal, protegía la primera posición de Norris, mientras Piastri cedía a la presión de Mercedes. Russell ganó una buena pelea con Hamilton para completar el podio y Alonso confirmó un sexto lugar que Aston Martin cree que será un punto de inflexión para regresar a peleas más importantes.