La Policía de Berlín ha parado este sábado la marcha de unos 5.000 aficionados de la selección turca de fútbol que se dirigía al Estadio Olímpico de la capital alemana tras detectar el uso del gesto de los Lobos Grises, una organización ultraderechista turca. La selección turca se enfrenta esta noche a la de Países Bajos en el marco de los cuartos de final de la Eurocopa de fútbol.
Miles de aficionados turcos partieron de Breitscheidplatz hacia la estación de Charlottenburg pero al detectar el símbolo de extrema derecha la Policía intervino para recordar a los aficionados que no se podía realizar el gesto.
El saludo de los Lobos Grises se realiza con las dos manos alzadas y los dedos índice y meñique extendidos simulando las orejas del animal. El gesto en sí no está prohibido en Alemania, pero se trata de una expresión política inapropiada para un acto deportivo, ha explicado una portavoz policial, Beate Ostertag, en declaraciones a la televisión berlinesa RBB.
El saludo ha tenido una cierta trascendencia porque el futbolista turco Merih Demiral realizó el gesto en la eliminatoria anterior, en un partido contra la selección de Austria, tras meter un segundo gol. La UEFA le ha sancionado con dos partidos.
El internacional alemán de origen turco Mehsut Özil ha respaldado a Demiral publicando en su cuenta en Instagran un mensaje de ánimo con la imagen de las dos manos de Demirel haciendo el gesto.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha viajado a Alemania para presenciar el partido con Países Bajos y ha manifestado su apoyo a Demiral.
Unos 3.000 agentes han sido desplegados para garantizar la seguridad antes, durante y después del Partido. La Policía de Berlín ha recibido apoyo de agentes de Brandeburgo, Baviera, Hesse, Hamburgo, Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Sajonia-Anhalt y Turingia, así como de la Policía Federal.
Las zonas para aficionados previstas en la puerta de Brandemburgo y ante el Reichstag han sido clausuradas por el riesgo de tormentas.