El Gobierno de Suecia ha confirmado este jueves que un cuarto ciudadano sueco ha sido condenado a muerte en Irak y ha convocado de nuevo al encargado de negocios iraquí para expresar su rechazo contra estas sentencias.
El Ministerio de Exteriores sueco ha señalado que Estocolmo ha trasladado «su firme protesta» ante estas condenas y ha reclamado que las sentencias no sean ejecutadas. «También se han trasladado demandas para que Irak respete sus compromisos internacionales en materia consular», ha dicho.
«La postura de Suecia y de la UE sobre la pena de muerte es muy clara. Condenamos la aplicación de la pena de muerte. Nos oponemos a ella siempre, en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia», ha señalado a través de un comunicado publicado en su página web.
El ministro de Exteriores sueco, Tobias Billstrom, confirmó el jueves que dos suecos habían sido sentenciados a muerte, un mes después de que saliera a la luz la primera de las sentencias, todas ellas por su papel en el asesinato en enero de un líder mafioso sueco asentado en la capital iraquí, Bagdad.
Asimismo, afirmó que había informaciones sobre otra condena a muerte contra otro sueco por un tema de tráfico de drogas, si bien no confirmó que hubiera sido dictada. De esta forma, el comunicado de Estocolmo ratifica que un tribunal condenó a esta cuarta persona, si bien el caso no estaría relacionado con el anterior, tal y como ha recogido el diario sueco ‘Aftonbladet’.
Las tres primeras condenas derivaron del asesinato del mafioso Mustafá Aljiburi, conocido como ‘Benzema’ y jefe de la recién formada rama de la mafia sueca La Liga. El hombre fue asesinado a tiros en enero a plena luz del día en una de las calles más concurridas de Bagdad, en el barrio de Al Amiriya.
Aljiburi, ciudadano sueco que había llegado a fingir su muerte en 2023 para intentar engañar a bandas rivales, se trasladó a Bagdad debido a varios conflictos en curso con otras mafias suecas. Recientemente, había formado La Liga tras separarse de la mafia Foxtrot, liderada por Rawa Majid, en medio de una intensificación de las luchas internas en Foxtrot.