La Junta Departamental de Salto rechazó la moción de declaración sobre la situación en Venezuela, citando la necesidad de mantener la unidad.
La Junta Departamental de Salto rechazó la moción de apoyo a Venezuela tras las elecciones del 28 de julio, argumentando la necesidad de mantener la unidad y la coherencia en sus declaraciones.
El pasado jueves 1 de agosto de 2024, la Junta Departamental de Salto se enfrentó a una controversia al rechazar una moción de declaración que manifestaba apoyo al pueblo venezolano y condenaba las recientes elecciones presidenciales en Venezuela del 28 de julio. La moción, presentada por las bancadas de los partidos Nacional y Colorado, no obtuvo el respaldo del Frente Amplio, que decidió no acompañarla, generando críticas por su postura y argumentos.
Patricia García, edil del Frente Amplio, argumentó:
"Nosotros, como bancada del Frente Amplio, hemos arribado a la conclusión de que no nos apartamos de un parámetro que respetamos como unidad. Respetamos las palabras del secretario general del ejecutivo del Frente Amplio, Fernando Pereilla, quien expresó nuestra postura sobre las elecciones en Venezuela. Valoramos la invitación de la bancada del Partido Colorado y del Partido Nacional, pero actuamos unidos como siempre frente a estos actos."
Este argumento fue percibido como una clara defensa del régimen de Nicolás Maduro, ignorando las graves denuncias de fraude electoral y represión violenta en Venezuela. La decisión de no apoyar la moción fue vista como un acto de complicidad y falta de solidaridad con el pueblo venezolano, que lucha por recuperar su democracia y derechos fundamentales.
Facundo Marziotte, edil del Partido Nacional, expresó su indignación:
"Nosotros, junto a la bancada del Partido Colorado, hemos preparado esta moción para dar un mensaje político desde nuestro lugar, respaldando la democracia en Venezuela. Entendemos que el país vive una situación trascendental y creemos que es importante enviar un mensaje de apoyo desde aquí. En Venezuela hubo una elección con presos políticos y candidatos que no pudieron presentarse. Creemos que es fundamental respaldar las libertades públicas que se han perdido en ese país."
La negativa del Frente Amplio a sumarse a esta moción resalta una postura que muchos consideran indolente ante el sufrimiento del pueblo venezolano. En un momento donde la solidaridad internacional es crucial, el Frente Amplio decidió mantenerse al margen, priorizando su unidad interna por sobre la defensa de los derechos humanos.
Carlos Rey, edil del Partido Colorado, añadió:
"Nosotros no actuamos como coalición, actuamos como demócratas. El informe del Centro Carter fue categórico en decir que el proceso electoral en Venezuela no ofrece garantías de transparencia. Queremos destacar la importancia de un sistema electoral transparente, como el que tenemos en Uruguay. La represión violenta en Venezuela y la falta de transparencia en el proceso electoral son inaceptables."
La decisión del Frente Amplio de no apoyar la moción es vista como una traición a los principios democráticos que dicen defender. Al no condenar abiertamente la dictadura de Maduro, el Frente Amplio se alinea tácitamente con un régimen que ha oprimido a su pueblo y destruido la democracia en Venezuela.
La moción fue finalmente rechazada, poniendo en evidencia las divisiones políticas dentro de la Junta Departamental de Salto y destacando una vez más la controvertida postura del Frente Amplio respecto a la situación en Venezuela. Esta actitud no solo desilusiona a aquellos que esperaban un firme apoyo a la democracia, sino que también socava la credibilidad del Frente Amplio como defensores de los derechos humanos en la región.