La menopausia introduce importantes cambios en la salud que pueden gestionarse eficazmente con el apoyo médico adecuado.
Nuevas investigaciones destacan la menopausia como un periodo crítico para la salud cardiovascular y metabólica, subrayando la importancia de una gestión proactiva.
Al llegar a los 50 años, las mujeres enfrentan una de las transiciones más significativas en su salud: la menopausia. Con una edad media de 51 años en Estados Unidos, la menopausia y el periodo que la precede, conocido como perimenopausia, traen consigo cambios profundos en casi todos los sistemas del cuerpo. Sin embargo, muchas mujeres se encuentran desprevenidas para manejar estos cambios.
Asima Ahmad, especialista en endocrinología reproductiva y directora médica de Carrot Fertility en Estados Unidos, señala que muchas mujeres no están bien informadas sobre lo que implica la perimenopausia y la menopausia antes de experimentarlas. Durante la perimenopausia, las mujeres comienzan a experimentar síntomas debido a la disminución gradual de la producción de estrógenos, y no todas están preparadas para identificar o gestionar estos cambios.
"El recorrido de cada mujer es único," comenta Ahmad, explicando que el periodo de transición puede variar significativamente en duración, afectando a algunas mujeres durante 7,4 años en promedio, y a otras hasta por 20 años. Este periodo no solo conlleva cambios hormonales, sino que es también crucial para la salud cardiovascular y metabólica de la mujer.
Kathryn Lindley, cardióloga del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt, enfatiza la menopausia como una ventana crítica para la futura salud cardiovascular. Es un tiempo cuando los riesgos de enfermedades cardíacas, insuficiencia cardíaca y accidentes cerebrovasculares comienzan a aumentar significativamente debido a cambios en la presión arterial, el peso, el azúcar en sangre y el colesterol.
El reconocimiento y manejo de los síntomas cardíacos es crucial, especialmente porque estos pueden presentarse de manera diferente en mujeres que en hombres. Además, las estrategias de prevención y tratamiento para los síntomas menopáusicos son diversas y pueden requerir un enfoque de ensayo y error para encontrar la opción adecuada para cada individuo.
Además de los tratamientos médicos, Ahmad y Lindley subrayan la importancia de las conversaciones abiertas con los profesionales de la salud sobre la menopausia. Iniciar estas discusiones temprano puede ayudar a las mujeres a encontrar proveedores de salud que puedan satisfacer adecuadamente sus necesidades durante este periodo de cambio.
Finalmente, aunque la menopausia presenta desafíos significativos, también es un periodo que eventualmente estabiliza, llevando a las mujeres a una nueva fase de equilibrio en su bienestar y salud.