Diosdado Cabello, nombrado Ministro del Interior y Justicia, intensifica su papel en el gobierno de Nicolás Maduro.
Tras la ratificación de fraude electoral, Diosdado Cabello asume un rol crucial en el gobierno venezolano como ministro del Interior y Justicia.
El presidente venezolano Nicolás Maduro ha realizado cambios significativos en su gabinete, destacando la designación de Diosdado Cabello como el nuevo Ministro del Interior, Justicia y Paz. Esta decisión se produce después de que el Tribunal Superior de Justicia confirmara alegaciones de fraude en las elecciones del 28 de julio.
Durante una conferencia de prensa, Maduro anunció que la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, además de mantener su cargo, tomará las riendas del Ministerio de Petróleo. Rodríguez cede el Ministerio de Finanzas y Comercio a Anabel Pereira Fernández, reforzando su enfoque en la industria petrolera.
Diosdado Cabello, un referente histórico del chavismo, retoma un cargo que desempeñó hace más de dos décadas. En su declaración, Cabello expresó su compromiso al responder al "clarín de la patria". Maduro elogió la trayectoria de Cabello, destacando su capacidad para "consolidar la paz" y manejar "tanta conspiración".
El Ministerio del Interior, liderado por Cabello, supervisará importantes cuerpos de seguridad y administrativos, incluyendo la Policía Nacional Bolivariana (PNB), el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), y el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME).
Recientemente, Cabello fue noticia por sus amenazas hacia figuras de la oposición como Edmundo González Urrutia y María Corina Machado, prometiendo represalias después de que estos desafiaran los resultados electorales oficialmente anunciados.
Además, en otros cambios ministeriales, Pedro Tellechea deja el Ministerio de Petróleo para liderar el Ministerio de Industria y Producción, y la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) será dirigida por Héctor Obregón.
Este ajuste en el gabinete llega en un momento de intensa polémica política, con la oposición organizando más movilizaciones en respuesta a la falta de transparencia del Consejo Nacional Electoral (CNE) respecto a las últimas elecciones.