Abuso policial a menor: la policía salteña bajo sospecha por presunta red de explotación sexual

Un caso de abuso policial a una menor de 14 años destapó una red de explotación sexual en Salto. La madre de una amiga la sacaba del liceo para prostituirla y la investigación apunta a posibles vínculos con policías y altos funcionarios, generando indignación y temor por la impunidad.

La investigación sigue en curso y no se descarta la participación de más policías en este caso de explotación de menores en Salto.

La investigación revela que la madre de una amiga sacaba a la menor del liceo para prostituirla; la policía podría estar involucrada.

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Salto está que arde tras salir a la luz un escandaloso caso de explotación sexual de menores que involucra a una gurisa de 14 años. Según informó Salto Al Día, la adolescente era supuestamente prostituida por la madre de una amiga, que la sacaba del liceo antes de tiempo para hacerla "laburar" a cambio de plata. Lo que parecía un hecho aislado ahora apunta a ser una red mucho más grande, donde estarían metidos incluso algunos policías.

El tema se maneja con total discreción debido a la gravedad de las denuncias y las posibles implicancias. Los testimonios indican que la gurisa era retirada del liceo por esta mujer, que la llevaba a distintos lugares para prostituirla, y que incluso había contactos con algunos uniformados, lo que hace que el caso sea aún más turbio. Los canas implicados ya desfilaron por Fiscalía, pero salieron en libertad, lo que generó bronca e indignación entre los vecinos, que no entienden cómo es posible que los que deberían protegerlos anden tan campantes mientras la investigación sigue.

La cara oculta de la Policía: los que deberían cuidar ahora están del lado oscuro.

Este escándalo no solo muestra el horror de la explotación sexual de una menor, sino que también destapa un problema de fondo: el rol oscuro que algunos policías estarían jugando. En vez de cuidar y proteger, parece que algunos eligieron aprovecharse de los más vulnerables, embarrando aún más a una institución que ya viene golpeada por otros líos. Salto está en llamas, y con razón: este caso no solo es un delito aberrante, sino una traición a la confianza de todos.

Las denuncias señalan que los milicos involucrados fueron liberados tras declarar, lo que ha levantado una ola de indignación. La Policía, que tendría que estar del lado de la gente, queda en evidencia una vez más, y la sensación de impunidad sigue presente. La comunidad exige justicia y que se investigue a fondo, caiga quien caiga, porque no se puede permitir que quienes deben cuidar terminen siendo cómplices de estas barbaridades.

Una red podrida y el miedo a la impunidad.

Los testimonios recabados por Salto Al Día indican que la gurisa era llevada sistemáticamente por esta mujer, la madre de su amiga, que la sacaba del liceo para prostituirla. Los detalles son indignantes: se habla de arreglos y pagos con adultos que deberían estar del lado correcto de la ley. Los rumores de que hay más milicos metidos solo agravan la situación y dejan claro lo grave del asunto.

Las fuentes dijeron a Salto Al Día que este caso demuestra que en Salto hay algo muy podrido, y la ciudadanía ya no se queda callada. Los hechos tienen que esclarecerse y la justicia tiene que actuar con todo su peso para que no haya más gurisas víctimas de estas atrocidades, indicaron.