La clasificación se vive con intensidad. El arquero muestra su compromiso y entusiasmo en cada paso hacia el objetivo. Foto: Jorge Rodrigues/AGIF/FocoUy
Aguerre comparte la euforia tras vencer a Flamengo, habla del esfuerzo diario, la entrega del equipo y su conexión con los hinchas en un camino lleno de desafíos.
En el programa “Padre y Decano” (Radio 10.10 AM), Aguerre inició recordando la hazaña del jueves en el Campeón del Siglo: "Esto es un sueño hecho realidad. Lo que vivimos fue increíble, ¡espectacular! Me llevó de vuelta a la final de la Libertadores 2011, pero entonces estaba en la tribuna. Ahora, defender la camiseta de mis amores desde la cancha… ¡es algo fuera de este mundo!".
“Uno siempre debe soñar en grande, sí, pero el sueño no se cumple solo. Hace falta trabajo duro, dedicación constante. Yo nunca bajé los brazos. Ahora estoy viviendo este momento, superándome cada día y saboreando cada segundo en Peñarol”.
Sus compañeros también fueron tema de conversación: “La defensa, el equipo, ¡es increíble! Todos somos uno. Todos atacamos, todos defendemos. Aquí, quien llega sin ser hincha de Peñarol, termina siéndolo. ¡Esto es una locura, te atrapa!”.
“Yo amo a Peñarol”, afirmó con fuerza. “Cada partido lo vivo a mi manera. Dicen que estoy loco, y puede que lo esté, pero soy un loco bueno. En la cancha soy un hincha más, aunque también tengo la responsabilidad de mantener la calma y respaldar al equipo cada vez que me toca”.
La charla que dio de qué hablar
La entrevista no podía pasar por alto el intercambio que Aguerre tuvo con Giorgian De Arrascaeta y Nicolás De La Cruz al inicio del partido, un momento que se volvió viral en redes.
"Les dije lo mismo que en Río", confesó Aguerre, riendo. “Les pedí lo de siempre: ‘Hoy no, hoy no es el momento. Ustedes ya ganaron la Libertadores. Ahora nos toca a nosotros. Hagan un partido tranquilo y luego vengan a Peñarol a disfrutar’. Cosas de la cancha, bromas que surgen en esos momentos”, explicó.
“Les tengo un gran respeto. Hicieron un trabajo excelente. Flamengo es una potencia, con recursos y talento de sobra, pero nosotros fuimos leones. Sabíamos a lo que íbamos, quién estaba enfrente. Hicimos nuestro trabajo y logramos un objetivo que muchos creían imposible. ¡Y no vamos a parar hasta alcanzar la meta final!”.