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El sector maderero ha experimentado un crecimiento constante, generando empleos y exportaciones, con proyecciones de mayor impacto económico.
Con exportaciones que se multiplicaron por ocho desde 2001, el sector maderero se consolida como un motor clave de crecimiento económico en Uruguay.
El sector maderero se posiciona ampliación gracias a apenas tres décadas de la Ley Forestal en Uruguay, convirtiéndose en un reductor de la economía del país. Sus exportaciones aumentaron notablemente debido a los millares de personas empleadas en esta área y a las fuertes inversiones. Según el último estudio del Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social, las ventas al exterior de madera sólida pasaron de US$ 48 millones en 2001 ahora US$385 millones en 2024. EEUU, la India y China.
Los datos UYPRA relativos a la India, sin problemas causados por el tifón que afectó al país, exportaron US$ 108 millones hasta octubre. Otros Estados, como México, Vietnam, Malasia y el Reino Unido, aumentaron sus importaciones de productos de madera en mil millones cúbicos comprados a Uruguay en América Latina. Las tres empresas con mayor capacidad de procesamiento de troncos aserrados en Uruguay son Lumin, Arboreal y Urufor. La mayoría de los aserraderos del país se encuentra en los departamentos de Rivera y Tacuarembó, mejorandores con gran capacidad industrial. No obstante, la capacidad de los aserraderos es baja en cuanto a la cantidad máxima de madera procesadas pues el 90 % NO llega a 20 mil m³.
Impacto socioéconomicos
La industria maderera es muy relevante para algunas de las zonas más vulnerables del país. Se produce con más fuerza en Rivera, Tacuarembó, que tienen el ingreso promedio más bajo, $31,800, donde vive un significativo 14.2% de la población bajo la línea de la pobreza. El 73.3 % de los trabajadores no ha terminado sus estudios de secundaria, demostrando que la industria es una importante oportunidad de empleo para personas con menor nivel educativo y en zonas con alta incidencia de la pobreza. Características del empleo y la automatización
La fuerza laboral de la madera se distribuye de manera equitativa entre franjas etarias, predominando la de 30-64 años. Con respecto a la escolaridad, la mayor parte cuenta con educación primaria o ciclo básico y la representación de la formación terciaria es baja. A pesar de que la automatización es un importante factor local, el estudio de Ceres apunta a que una gran parte de la tecnificación ya tuvo lugar y la exposición en pérdida de empleo para el corto plazo sigue siendo baja aunque el sector corre gran riesgo en función de las tareas manuales permitidas bajo el criterio de Ceres.
El impacto económico y sus proyecciones futuras.
Con estas instalaciones, el sector maderero da soporte y colaboración a la economía en general. Una inversión de USD 390 millones directo y aproximadamente USD 500 millones de inversión indirecta, considerando así, un ingreso de 890 millones al año. Además, con inversiones proyectadas a 5 años de 350 millones de USD en los próximos 5 años, se espera un incremento en las exportaciones de aproximadamente unos 150 millones anuales, y consecuente al incremento de mano de obra, para este caso para la construcción, con 2130 puestos de trabajo al año y 4300 en forma indirecta. Futuro de la construcción de madera.
Creemos que el crecimiento de la producción de madera, como señalamos anteriormente, también creará oportunidades en la silvicultura, el transporte de carga y los servicios agropecuarios en general, siendo la madera un sector de los que más posibilidades de desarrollo tiene. según el estudio del Ceres, la madera y sus encadenamientos industriales agregarán USD 190 millones a la economía de los próximos 10 años. Sin embargo, la lectura de Ceres implica que el aspecto contribuirá al desarrollo de las empresas.
Fundado el 9 de abril de 2010, Diario Salto Al Día es un medio de prensa de Uruguay que se dedica a informar sobre noticias nacionales e internacionales.