El futbol argentino al rojo vivo: Miguel Borja acusado de maltrato físico a sus hijos

Miguel Borja es investigado por presunto maltrato a sus hijos. La denuncia surgió tras una alerta en el colegio de los menores.

El jugador enfrenta una investigación tras la denuncia de maltrato hacia sus hijos, mientras la justicia evalúa las pruebas en curso.

El delantero colombiano Miguel Borja está bajo investigación tras la denuncia de una maestra por presunto maltrato físico hacia sus hijos menores.

El fútbol argentino se encuentra sacudido por una grave denuncia que involucra al delantero colombiano Miguel Ángel Borja, figura de River Plate. Este martes, se conoció que el jugador está siendo investigado por un presunto caso de violencia familiar, específicamente maltrato físico, hacia sus hijos de siete y diez años. La alerta fue dada por la directora del colegio en el que los menores cursan sus estudios, ubicado en Canning, una exclusiva zona de countries en la provincia de Buenos Aires.

El episodio que desató la investigación tuvo lugar en el Instituto Grilli, cuando una docente, preocupada por el comportamiento del menor de los niños, lo interrogó al notar que se encontraba angustiado. Según trascendió, el pequeño, en medio de su malestar, habría dicho: "No hablen con mi papá porque me pega". Ante esta revelación, se activó el protocolo de acción previsto para situaciones de posible violencia familiar.

Siguiendo los pasos establecidos, la directora del colegio, Valeria Goluza, notificó de inmediato al Servicio Local de Niñez, que tomó cartas en el asunto. Las autoridades dispusieron un primer examen médico, conocido como "precario", para determinar si los niños presentaban signos de violencia. La evaluación fue realizada en conjunto con la madre de los menores, Linda Pérez Martínez, quien también se mostró preocupada por la situación.

El informe inicial, elaborado por el gabinete de Niñez y el Servicio Local, concluyó que los niños "no sufrieron ningún tipo de violencia". No obstante, este no fue el fin del caso, ya que la fiscal María Lorena González, encargada de la UFI 3, continúa con la investigación para esclarecer completamente lo sucedido. Las pesquisas seguirán su curso, aunque los menores quedaron bajo el cuidado de sus padres.

El testimonio de la maestra del niño fue clave para que se activara la intervención. Según el relato, la docente notó al niño angustiado y con un comportamiento inusual en clase. Tras varias llamadas de atención, el pequeño confesó que temía hablar con su padre porque, según sus palabras, lo golpeaba. A pesar de que una vicedirectora mencionó la existencia de una pequeña raspadura sobre la rodilla del menor, no se encontraron otras lesiones visibles.

Por su parte, el club River Plate ha seguido de cerca la evolución de la denuncia. La institución, a través de sus representantes legales, está monitoreando los pasos que sigue la investigación judicial, pero hasta ahora no se ha manifestado en un comunicado oficial y no ha tomado medidas judiciales contra el jugador. Miguel Borja, de 30 años, se había convertido en una incorporación estrella para refrescar el ataque de River Plate en 2022, con Marcelo Gallardo al mando. 

Su activa carrera en el fútbol internacional y su paso por la selección colombiana y varios clubes de renombre lo mantuvieron siempre en el ojo de la opinión pública. Sin embargo, en esta ocasión, su nombre no se ha mencionado por goles o acciones arriba del campo, sino por una grave acusación en su contra que elimina la imagen pública y familiar del jugador. Si bien el caso había sido “resuelto” inicialmente, la fiscalía mantuvo la mesa abierta para investigar en profundidad lo ocurrido. En estos casos, las autoridades locales juegan un papel determinante en la protección de los menores y la atención de su bienestar. 

Aunque no se encontraron pruebas de abuso, la investigación seguirá en curso y revelará si lo ocurrido era cierto o no. Este tipo de acusaciones, y más si involucran a figuras públicas como en este caso, generan un amplio abanico de debates sociales. Aquí radica la importancia y la sensibilidad hacia este caso en particular, en el que la seguridad y el bienestar de los niños pone en duda la ética de las instituciones reguladoras como las escuelas y los equipos de fútbol.

 Por el momento, Borja sigue entrenando de manera normal, probablemente a la espera de los avances del caso. Sin embargo, la presión mediática aumenta día tras día y la causa aún no ha sido resuelta. Aunque no se haya comunicado ninguna medida disciplinaria por parte del club, es probable que suceda en caso de resultados positivos.

©Diario Salto Al Día. Todos los derechos reservados
Uruguay