Producción abundante de pollo asegura precios bajos: el mercado aviar mantiene el acceso económico para los consumidores

Con una producción aviar en aumento y precios que se mantienen bajos, el pollo sigue siendo una opción económica para los consumidores uruguayos. A pesar del crecimiento en la demanda, los precios no reflejan los aumentos de la inflación gracias a una oferta estable y robusta del sector.

La abundante producción de carne aviar ha permitido mantener los precios bajos, ofreciendo a los consumidores una alternativa económica.

La producción de carne aviar en Uruguay se ha incrementado en 2024, lo que ha permitido mantener los precios accesibles para los consumidores en todo el país.

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Al contrario de la mayoría de las proyecciones, el precio del pollo en Uruguay ha sido un respiro para los consumidores locales. A diferencia de otros productos cárnicos que han visto un aumento significativamente mayor en sus precios, el pollo ha mantenido un precio accesible. Esto fue posible debido a su producción, que no solo se ha mantenido constante, sino que fue superior a lo que esperaba la industria. Siguiendo desde mayo de 2024, hubo una disminución del precio del pollo entero. Según lo presentado por Federico Stanham, experimente presidente de la Cámara Uruguaya de Procesadores Avícolas : “los precios del pollo en el mercado internos están 18% debajo con inflación que lo que estaban el año pasado ”. 

Este es un caso especial, ya que la producción normalmente tiene se asocia con precios estables o crecientes. Tal fue el caso del mercado uruguayo de proveedores de carne aviar, que es responsable de aproximadamente el 50% del consumo total de carne en Uruguay. En agosto de 2024, el precio de platitos de pollos se ubicó en 78.58 pesos por kilo, muy por debajo de los 96.18 pesos que serían de haberse ajustado estrictamente por inflación. Sin embargo, esto no significó una reducción de los precios, lo cual suele ir de la mano con una menor producción en otros mercados. En vez de ello, se observó un incremento del 6.6% en la producción aviar al compararlo con el mismo período del año pasado, lo que garantizó una abundancia de oferta.

El ambiente en el mercado interno fue, por otro lado, muy favorable para el acceso al pollo. Si bien el Grembulkofsaga no prohíbe las importaciones de productos de ave, la producción nacional prácticamente ha abastecido al mercado interno. Según fuentes de la industria, las empresas intentaron hacer este último en aquellos productos aviares que los productores uruguayos no producen en grandes cantidades. Senville observó que, por lo que su gremio sabe, no existen necesidades excesivas de empresas importadoras de pollos para importar y comercializar en el mercado interno una mayor cantidad de productos foráneos. 

Esto indica que en el mercado uruguayo al menos en este período, la autosuficiencia de la producción no fue otorgada por las importaciones. En cuanto a la ingesta de carne aviar, cabe señalar que ha experimentado un crecimiento en los últimos años. Actualmente, ha llegado a 25 kilos por año por habitante, diez más que hace una década. Eso va de la mano de la percepción de los uruguayos sobre la carne de pollo: es de “exportación” porque su calidad sanitaria es alta y es muy versátil en la cocina. Stanham, de hecho, dijo que el acceso al producto siempre ha sido una razón, pero en este caso la calidad sensacional y la capacidad de adaptarse a muchas formas de consumo han sido determinantes.

En la última década, la carne de pollo ha tomado la delantera y ha sustituido lentamente a otros tipos de carne en la dieta del consumidor uruguayo. Si bien algunos consideran que los uruguayos son fanáticos de la carne de res, en estos años previos a la crisis, debido al aumento de precio de la carne tradicional, las familias uruguayas buscaron una alternativa mucho más barata, pero de alta calidad. Con respecto al futuro del consumo en los próximos meses, muchos expertos coinciden en que están en camino de crearse. La producción de carne de pollo seguirá en aumento, lo que favorecerá al consumidor uruguayo. Los máximos históricos de producción y niveles aceptables han llegado a un acuerdo donde no hay conflictos de interés. A fines de 2024, la industria avícola continúa siendo una industria clave.