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La comitiva real enfrenta protestas en su visita, reflejando la tensión y el descontento de los afectados en la comunidad.
La visita de la comitiva real a Paiporta terminó en caos; lanzamientos de barro y protestas en medio de la indignación de los vecinos.
Lo que debía ser un encuentro de apoyo y consuelo en Paiporta, uno de los municipios valencianos más golpeados por el temporal de DANA, derivó en un episodio de caos e indignación. Los reyes de España, Felipe y Letizia, acompañados del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, arribaron este domingo al lugar para solidarizarse con las familias afectadas por el fenómeno meteorológico, que ha cobrado la vida de más de 214 personas en la región. Sin embargo, el recibimiento por parte de los vecinos no fue el esperado, y la situación pronto se tornó incontrolable.
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Tensión y gritos en el centro de Paiporta
A su llegada, la comitiva real fue recibida con gritos de “asesinos” y “dimisión” por parte de un nutrido grupo de vecinos que expresaban su frustración y descontento ante la respuesta oficial a la tragedia. El enojo, que reflejaba una sensación de abandono entre los afectados, no se limitó a los gritos: los manifestantes comenzaron a arrojar barro a los miembros de la comitiva, incluidos los monarcas y el propio Carlos Mazón, dejando a varios de ellos visiblemente manchados.
La reina Letizia, en particular, fue objeto de atención debido a que, en medio de los insultos y el tumulto, fue vista con lágrimas en los ojos mientras intentaba dialogar con algunos vecinos. Los relatos de dolor y pérdida la conmovieron profundamente, y al escuchar las palabras de quienes han visto su vida destruida por el temporal, su emoción fue evidente.
Una evacuación y un ambiente hostil.
El ambiente tenso escaló hasta el punto de que la reina Letizia tuvo que ser evacuada para evitar mayores enfrentamientos. Mientras tanto, Pedro Sánchez, en una situación inesperada, fue agredido supuestamente con un palo y retirado rápidamente por su equipo de seguridad. En un intento por calmar los ánimos, Felipe VI se quedó entre los manifestantes, intentando dialogar con algunos vecinos, aunque su esfuerzo fue acompañado de un coro de gritos de “asesino” por parte de algunos asistentes. Pese a la hostilidad, el monarca permaneció en el lugar por algunos minutos más, acompañado por Mazón, ambos con sus ropas manchadas de barro.
Solidaridad con los equipos de emergencia y los vecinos afectados
Previo a los altercados, los reyes habían tenido un encuentro con los cuerpos de emergencia desplegados en la zona, agradeciendo su trabajo y compromiso en un momento de tanta urgencia. Durante más de una hora, conversaron con miembros de la UME, Cruz Roja, Guardia Civil y Policía Nacional, quienes han sido fundamentales en las labores de rescate y asistencia en Paiporta y otras localidades afectadas.
La comitiva también tuvo un breve encuentro con el chef José Andrés, quien, a través de su ONG World Central Kitchen, está brindando apoyo alimentario en las áreas devastadas, repartiendo raciones de comida caliente a los afectados. En medio del caos, la presencia del reconocido chef fue un recordatorio de la solidaridad que muchos están mostrando en estos momentos críticos.
El mensaje de la Casa Real
Desde la Casa Real se emitió un comunicado expresando el profundo agradecimiento hacia aquellos que han manifestado su apoyo y solidaridad con el pueblo español tras el paso de la DANA. En sus palabras, los monarcas subrayaron que “las muestras de afecto y hermandad en este difícil momento nos hacen sentir acompañados en esta tragedia que azota nuestro país”. Este mensaje buscaba transmitir calma y reafirmar el compromiso de la Casa Real con quienes han sufrido las devastadoras consecuencias del temporal.
Las reacciones de las autoridades locales
Amparo Folgado, alcaldesa de Torrent, agradeció la visita de los reyes y destacó el impacto emocional que su presencia ha tenido en los vecinos de la región. En un momento de gran vulnerabilidad, Folgado subrayó que el respaldo de la Casa Real es un impulso moral necesario para las familias afectadas. La alcaldesa mencionó que los reyes Felipe y Letizia se vieron “sumamente cercanos y comprensivos”, y que su disposición a colaborar en la recuperación de la región ha sido un alivio para la comunidad.
“Nos reconforta saber que no estamos solos en este proceso de reconstrucción”, declaró Folgado. La alcaldesa reiteró la importancia de la sensibilidad mostrada por los monarcas y su promesa de ayudar en lo posible para facilitar la recuperación de las zonas más afectadas. “En momentos tan duros, sabemos que contamos con su respaldo nos da fuerzas para seguir adelante”, concluyó la funcionaria, visiblemente emocionada.
Un recordatorio de la crisis y la importancia de la empatía.
La visita a Paiporta no fue la esperada. Lejos de ser una jornada tranquila de apoyo, se convirtió en un recordatorio de la magnitud de la tragedia y de la necesidad de empatía hacia aquellos que han perdido tanto. La respuesta hostil de los vecinos refleja el dolor y la frustración acumulada en una comunidad que siente que las promesas no se han cumplido.
Para los monarcas y las autoridades, el reto ahora es actuar con celeridad y compromiso para transformar el descontento en acciones concretas que ayuden a aliviar la situación de los damnificados. La visita, aunque accidental, subraya la necesidad de un apoyo sólido y continuo en estos tiempos de recuperación.
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