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Pelea en un boliche nocturno reaviva la preocupación por la seguridad en eventos sociales de Salto.
Intensa pelea en un boliche de Salto durante el festejo de egresados de colegios pone en evidencia las fallas de seguridad y reaviva el debate sobre los controles nocturnos.
Este domingo de madrugada, la tranquilidad de la Costanera Norte se vio interrumpida por una violenta pelea en el local bailable conocido como El Polo, mientras festejaban el egreso colegios privados. Según testigos y fuentes policiales, el incidente, cuyas causas aún no están claras, expone nuevamente las carencias de seguridad en los boliches y fiestas nocturnas, una problemática que parece repetirse fin de semana tras fin de semana.
"Era una fiesta privada, pero no deja de ser preocupante, ya sea baile o fiesta, es lo mimso", dijo el padre de un chico que fue a buscarlo tras enterarse de la trifulca.
"Acá no hay policía, solo guardias que poco hacen para controlar las situaciones", denunció un testigo del hecho. En las imágenes del altercado, que se han viralizado rápidamente, se observa cómo algunos muchachos intentan, sin éxito, separar a los involucrados. “Esto pasa en casi todos los boliches y fiestas, pero nadie denuncia, y tampoco hay una seguridad que garantice el bienestar de quienes salimos a divertirnos", afirmaron jóvenes que presenciaron la escena.
¿Falta de control o cultura de la irresponsabilidad?
La falta de seguridad en los locales bailables no es un tema nuevo. Según quienes frecuentan estos lugares, la ausencia de una presencia policial o de un protocolo adecuado para prevenir y gestionar incidentes deja la responsabilidad en manos de guardias que, en muchos casos, carecen de la capacitación necesaria para manejar situaciones de violencia.
Sin embargo, no se trata solo de un problema de controles. "Los jóvenes beben, se descontrolan y piensan que son Hulk", señaló con indignación una madre que llegó al lugar para buscar a su hija y terminó siendo testigo de la pelea. Esta percepción resalta otro aspecto de la discusión: el comportamiento de quienes asisten a estos locales. El consumo excesivo de alcohol, sumado a la falta de límites, genera un cóctel explosivo que convierte la diversión en peligro.
¿Soluciones drásticas?
El debate sobre cómo resolver esta situación no se hace esperar. Algunas voces plantean que, si no se puede garantizar la seguridad, las autoridades deberían considerar medidas extremas, como prohibir las discotecas. "Es un escarmiento necesario para que los jóvenes aprendan a comportarse y a no arruinar la diversión de los demás", sostuvo la misma madre, visiblemente molesta.
Por otro lado, hay quienes consideran que cerrar los boliches sería una solución simplista que no ataca las causas reales del problema. "No se trata de prohibir, sino de educar y de exigir más controles. Si no, ¿dónde queda la responsabilidad de los dueños de estos lugares?", cuestionó un joven habitué de la movida nocturna.
La responsabilidad compartida
Mientras las autoridades evalúan qué hacer, la realidad sigue siendo la misma: los boliches nocturnos continúan siendo escenarios de peleas y descontrol. Pero, ¿quién debe hacerse cargo? ¿Los dueños de los locales, las autoridades que permiten estas situaciones o los propios asistentes que pierden el control?
Salto enfrenta un desafío que trasciende a los boliches. Es una cuestión de responsabilidad compartida, donde la educación, la regulación y la seguridad deben trabajar juntas para garantizar que la diversión no termine en tragedia.
Lo cierto es que, mientras este debate siga sin respuestas concretas, escenas como la de El Polo se repetirán, dejando en evidencia un problema que, de no abordarse, podría tener consecuencias mucho más graves.
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Fundado el 9 de abril de 2010, Diario Salto Al Día es un medio de prensa de Uruguay que se dedica a informar sobre noticias nacionales e internacionales.